Contra todo tipo de abuso en el puesto de trabajo

Frankfurt’s Bocanegra explota y acosa.

Patriarcado y capital

¡Alianza criminal!

Nuestro conflicto con Frankfurt´s Bocanegra, una franquicia de bocadillos con 3 establecimientos, tiene varias particularidades a las que no nos habíamos enfrentado en otros momentos. Nos encontrábamos con un caso flagrante de explotación laboral y, además, una situación de acoso sexual laboral por parte del encargado.

Nuestra compañera acudió al sindicato en plena pandemia. Su situación económica era de extrema necesidad debido a que su ERTE era irrisorio al estar dada de alta tan sólo a media jornada. Pese a que en el contrato figuraba esa jornada laboral, nuestra compañera llegaba a trabajar de media unas 50 horas semanales con las horas extras no pagadas y, además, ejerciendo labores de categorías profesionales diferentes.

No contentos con estas condiciones miserables, muy comunes dentro del sector de la hostelería, nuestra compañera estuvo sufriendo sistemáticamente una situación de acoso sexual en su puesto de trabajo. Esto provocó una situación insostenible a nivel psicológico para ella que la obligó a darse de baja y dejar de acudir al puesto de trabajo.

No fue hasta septiembre cuando la compañera tuvo fuerzas para afrontar su situación y plantar cara a la empresa a través de la Sección de Feminismos de nuestro sindicato, en la que las compañeras la acompañaron en todo momento para gestionar los pasos a dar en cuanto al conflicto.

Fue entonces cuando comenzamos el contacto con la empresa para pedir el cese del contrato con indemnización por los daños causados además del correspondiente finiquito.

Frankfurt’s Bocanegra estuvo explotando a nuestra compañera durante 3 años pero, al cambiarla de establecimiento, no respetaron su antigüedad dentro de la empresa. Esto implica que el finiquito que ofrecen es inferior al que es justo.

Además, una vez denunciada la situación de acoso que allí tuvo lugar, su reacción fue el cuestionamiento del testimonio de nuestra compañera. Recibimos una respuesta vaga dudando de su versión, quitándole peso además de la negativa a despedir o tomar medidas hacia el encargado.

Nuestra respuesta fue inminente y decidida. A través de la acción directa pensamos estar enfrente de su establecimiento hasta que se decidan a reparar los daños causados a nuestra compañera.

El trabajo, con derechos

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